El olvido de Sevilla alienta la opción de una Almería no andaluza

“Es indignante. Nosotros queremos ser andaluces, pero da la impresión de que el poder sevillano lleva treinta años intentando que no lo seamos, habrá que planteárselo”. La frase, expresada en privado la semana pasada -nada más conocerse la composición del nuevo Gobierno de Andalucía- por un conocido y muy influyente empresario almeriense resume de manera contundente el sentir que ha despertado la nueva ausencia de representación de la provincia en el Consejo de Gobierno de la Junta.
Lejos de excentricidades o veleidades políticas de tinte ‘separatista’, el mensaje procede de personas de peso en el sector socioeconómico de la provincia que, por primera vez, han comenzado a cuestionar en contextos semipúblicos lo que aporta a Almería la pertenencia a la autonomía andaluza y si compensa a la provincia estar o no en ella.

Contar para algo

“Pertenecemos a Andalucía por cuestiones administrativas, pero el camino se hace andando y no vemos interés ni por parte de Sevilla ni del resto para que Almería esté ahí. No somos relevantes, ni nos miran ni les importamos un pepino. Si nos ignoran, pagamos con la misma moneda”, reflexionaba esta última semana el presidente de la Cámara de Comercio, Diego Martínez Cano.
Una postura similar era la que expresaba el presidente de la Confederación Empresarial Asempal José Cano, para quien la evidencia es que “Almería no recibe lo mismo que da”. “Nosotros somos empresarios y como empresarios tenemos que evaluar los resultados; los resultados no acompañan, está a la vista, así que ha llegado el momento de defender que Almería reciba lo mismo que da”, subrayaba Cano.
Como en el caso de los presidentes de la Cámara de Comercio y de Asempal, o del empresario citado más arriba, la idea de una Almería no ligada a Andalucía, autonomía a la que quedó vinculada en el año 1982 tras un referéndum al que los almerienses dieron la espalda con una escasísima participación, ha estado en boca de otros destacados nombres de la vida económica almeriense.
El gerente de los exportadores agrícolas de Coexphal, Juan Colomina, cree que no estaría de más “abrir un debate sobre si estaríamos mejor solos o quizá con Murcia”. “Lo cierto es que el sentimiento andaluz no lo tenemos arraigado, por qué no una comunidad del sureste, esto es simplemente una cuestión pragmática. Pero necesitamos un plan con agentes económicos y sociales, esto no pueden dirigirlo políticos”.