“En realidad no tiene gracia”, nueva campaña de Cruz Roja

Cruz Roja Española trabaja por la mejora de las condiciones de vida de los colectivos socialmente más vulnerables, una mejora que no es posible sin el acceso a un empleo estable. El Plan de Empleo de la Organización desarrolla un amplio número de programas y proyectos encaminados a promover el acceso al mercado de trabajo de las personas en situación de dificultad social, a través de su incorporación, mantenimiento y promoción en el mercado laboral. En la provincia de Almería, el Plan de Empleo de Cruz Roja ha trabajado con cerca de 5.000 personas en lo que llevamos de año.

En demasiadas ocasiones, los estereotipos asociados a jóvenes o mayores de 45 años, por ejemplo, hacen que su empleabilidad sea más complicada. Por ello nace la campaña “En realidad no tiene gracia”, que quiere llamar la atención de la sociedad y, muy especialmente de las empresas, para que el origen, la edad o el sexo de una persona no sean una barrera en su acceso al mercado de trabajo, especialmente cuando se trata de personas en situación de dificultad social.

Contribuir a eliminar los prejuicios basados en los estereotipos que levantan estas barreras es el fin principal de esta campaña. Prejuicios a los que dice no haberse enfrentado Pamela. De origen boliviano, lleva nueve años residiendo en España y, tras meses sin trabajar, decidió acudir a Cruz Roja en busca de información y orientación. A pesar de ser mujer y extranjera –e incluso habiendo trabajado en profesiones más típicamente de hombres- asegura no haberse sentido discriminada. Los problemas para acceder al trabajo llegaron con la crisis “hay mucha competencia”, dice al respecto. “Estaba baja de moral, desanimada, y en Cruz Roja me dieron un poco de ilusión. Me formé, hice las prácticas… Al sentir ese apoyo me sentí animada y con más ganas de hacer cosas”, explica Pamela. La joven de 29 años participó en un curso de camarera de pisos del Plan de Empleo con prácticas de empresa. Tras acabar el periodo formativo fue contratada durante los meses de verano por esta misma empresa. “Estoy muy agradecida a Cruz Roja por esto”, recalca.
Laura, con 22 años y sin experiencia, acudió a Cruz Roja con la carga a sus espaldas de no haber trabajado nunca. “Es que buscamos a gente más preparada, con experiencia…”. En la actualidad cursa Bachillerato y trabaja.